Al menos 3 semanas
GENERALIDADES
Brasil es un país encantador que les va gustar gracias a su diversidad. Tiene muchas islas y lindímas playas. La Amazonía, los parques naturales, la fauna silvestre y algunos pueblitos cuya arquitectura es divina. Además una buena cocina, sobretodo en Bahia. ¡Que programa!
¿Qué ver, qué hacer?
Sin ninguna duda Bahía es la región que más nos gusta. Boipeba es una isla encantadora y el parque Chapada Diamantina ofrece un sinfín de caminatas y cascadas adentro del bosque.
Ilha Grande, que queda cerca de Rio, combina lindas playas y caminatas a veces extensas. Paraty vale la pena ser visitada y se puede decir que tiene su buena fama merecida.
Ir a Manaus y quedarse unos días a la orilla de la Amazona y pasear por la extraordinaria ciudad de Ouro Prêto, es igualmente imprescindible.
Brasil es un país grande. Quizás demasiado grande como para ser recorrido en una sola vez pero ¡que hermoso que es!
¿Cómo visitarlo?
Al igual que en Chile todo se puede hacer en bus, no hace falta alquilar un coche. Obviamente, si uno quiere recorrer Brasil de punta a punta, tendría que viajar en avión. Lo que no termina siendo realmente barato. Pero si uno quiere ir en bus desde Belém hasta São Paulo, no hay ningún problema, sólo son 48 horas de viaje atravesando el aburrídisimo Mato Grosso.
Los turistas que vienen desde Europa aterrizan en São Paulo. Hay buses para ir a Rio o Paraty en 6 horas. Después todo depende de su itinerario.
El dinero no representa una dificultad ya que las tarjetas de crédito se aceptan en casi todos los negocios, salvo los pequeños. Hay muchos cajeros automáticos, así que retirar efectivo no es un problema. Lo único que hay que tener en mente es que el tope máximo de dinero a retirar depende tanto del banco de origen como del cajero automático. Es decir que, por ejemplo, se pueden retirar 500 € en una sucursal del Banco Brasil y solamente 200 € en otra.
Tengan mucho cuidado con los cajeros automáticos en los aeropuertos. A veces son « hackeados » y cuando uno saca plata le copian su tarjeta para usarla después. Mejor cambiar efectivo a su llegada e ir a un banco en la ciudad más tarde.
Los hoteles son bastante buenos en cuanto a su precio. Hay muy pocas cabañas como en Argentina, u hospedajes familiares como en Chile. Tendrán que elegir entre hotel u hostel. ¡Elijan su categoría! Sea lo que sea, lo seguro es que van a tener un impresionante desayuno.
Los restaurantes son buenos y variados. Para almorzar no duden en comer en un por quilo, cuyo nombre lo dice todo. Simple, eficaz, barato, propone entrada, plato principal, postres y se paga por peso. Una muy buena elección. A la noche hay buenas pizzerias y tremendas churrascarias con buffet libre y la carne asada a voluntad. ¡Ojo con la sobredosis!
No es difícil después de unos días entender por qué son tan gorditos los brasileños. Es el problema número uno de la salud pública hoy en día en Brasil.
¡Pero a ustedes, la comida les va a encantar!
